El micromachismo frente al dia de la mujer. ¿Quien gana?
Me levanté con talante positivo, hoy. Así, que he decidido que ya puedo volver a la genial tarea de haceros pensar, y, porque no, opinar. ¿Me acompañais?
Nada mejor para ello que retomar mi blog perdido entre las sabanas de la maternidad.
Hoy es el día de la mujer, por tanto, es mi día, puesto que yo soy mujer. Aquello que los filósofos clásicos llamaban lógica, y que mi madre llama lógica aplastante. ¡Qué mejor día!
Y con esta afirmación sucede una cosa interesante. Que mañana continuaré siendo mujer. Y pasado y el otro. Digo, creo, no sé.
Total que hoy saldré en todos los canales de radio y televisión, en todos los portales telemáticos que se precien de estar al día, y en un montón de referencias en prensa escrita (las pocas que quedan, claro).
You can!, dirán. Y todas esas cosas tan in que se dicen en el día de... el día de la acción contra el calentamiento terrestre, el día escolar de la no violencia y la paz, el día de la madre, y del padre, y del pingüino. You can!, o no. Pero de eso ya hablé en una ocasión anterior.
La cuestión es que mañana, cuando deje de ser el día de la mujer, aunque yo continúe siéndolo, volveremos a lo mismo.
Pero con tantos días, ¿qué más da un día, más o menos, dedicado a algo peregrino, ¿verdad?
Así que se me ocurrió que podía compartir este video de YouTube, sobre un tema que parece que nos terminamos de inventar unas cuantas, hace dos días: los micromachismos.
Y después de ver el video, va una y se pregunta, y ¿eso es tan importante? A ver, si la misma palabra lo dice: micro, micromachismo. Lo que viene siendo pequeño, muy pequeño. ¿Dónde está el problema? La cosa está en que las feministas ya se han vuelto a desubicar, ¿no?
A no ser que hables con las mujeres que lo escuchan día tras día, y que terminan sintiendo que esas palabras son correctas. Se llama subconsciente y te jode el día a día. Aquello de si el río suena, agua lleva. Y eso no sé yo si lo arregla el día de la mujer o el día de la marmota.
Y aquí te lo dejo. Para que pienses y, si te apetece, me digas que piensas.
Seguimos!!
Una de tantas estratagemas de ingeniería social. Así nos va
ResponderEliminargracias por tu opinión!
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