Tengo un dolor intenso en el brazo izquierdo desde hace tres semanas. Voy al medico y empezamos con el ritual de movimientos y pruebas para concluir que todo es tensional. Entonces pienso en aquel fisioterapeuta que hace unos añitos me "reparo" algo similar y busco su número de móvil. Sorpresa, no lo encuentro!
Reflexionando me doy cuenta de que el "arreglito" me lo hizo a los 15 años; echo cuentas y de eso hace ya 30 años!!! ¡Cáspitas! ¡El fulano ya debe estar mas que jubilado y ademas por aquellos tiempos no tenia móvil!
En ese momento es cuando una empieza a recordar lo que significa el paso del tiempo... pero esa es otra historia. A lo que iba: cuando te pones a pensar en el paso del tiempo no puedes evitar hacer una foto del momento en el que estas ahora, con 45 a punto de caer.
Soy lo que la etiqueta social llama una mujer de mediana edad. Eso lleva asociado el estereotipo de estabilidad: trabajo continuo y mas o menos seguro, pagos al día, grupo de amigos estable y familia monótona y seudo aburrida, por aquello de siempre "comer en el mismo plato" y todas las obligaciones que se le suponen.
El entorno socio político económico se ha encargado de hacernos descubrir que el estereotipo asociado al empleo se ha volatilizado. En el caso de la familia es diferente. La sensación de que ni tormenta ni marea puede cargarse el estereotipo de lo que debe ser una familia "normal" es enorme.
Definición de familia: La familia según la [Declaración Universal de los Derechos Humanos], es el elemento natural, universal y fundamental de la sociedad, y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado. Los lazos principales que definen una familia son de dos tipos: vínculos de afinidad derivados del establecimiento de un vínculo reconocido socialmente, como el matrimonio, y vínculos de consanguinidad, como la filiación entre padres e hijos o los lazos que se establecen entre los hermanos que descienden de un mismo padre.
Buf!! ya me maree.
Siguiendo con este apasionante tema, mi hija tuvo un "serio" problema en clase de ingles, cuando le hicieron escribir, en unos cuadritos muy monos, todo su árbol genealógico: ¿donde narices pongo al compañero de mama, que ademas no vive en casa? Pero para ella forma parte de su familia, ¿o no? Otra compañera no encontraba sitio para ubicar a sus dos mamas. Y espérate si hay alguna que tiene que colocar al hijo de la mujer de su padre, que no es su mama. ¡Que todo eso no cabe en los cuadritos del ejercicio estándar que les han colocado bajo la nariz!
Hace unos años un sesudo funcionario se dio cuenta de que algo no iba bien (se han dado casos de tener que inventarse el segundo apellido del crío recién nacido cuando solo había mama, porque según el funcionario no podía quedarse vacío el recuadro del formulario...) y comenzó el baile de etiquetas. Cambió de nombre al departamento y lo etiquetó "Benestar i families", así, en plural. Al cabo de un tiempo ganaron los otros y volvieron a cambiar el nombre "Benestar i familia", que no fuera a haber confusión con el estereotipo, ¿eh?
Por lo tanto continuamos con las excepciones a la etiqueta de familia: monoparental, familia reconstruida, familia homosexual. Pero, cuidado, que esto no se yo si son o no familias, porque no cuadran con la definición del estereotipo. Un follón!!
O tal vez el follón venga de la manía que tenemos de etiquetarlo todo. Cuando usamos una etiqueta con aquello que debe contener una caja y al abrirla nos encontramos con otra cosa, nos viene la decepción. Así nos pasamos la vida esperando llegar al objetivo que nuestras madres soñaban para nosotras: una familia protectora, con un padre, una madre y un par de churumbeles. A ser posible niño y niña y, como no, biológicos. ¡Que gran mentira!
Un abrazo a las "familias" que pacientemente me continuáis leyendo
Anna sú